Alguna vez, Châteauform'
Hemos querido hacer de Châteauform’ una experiencia serena y mágica, pensada para facilitar la cohesión, la creatividad y la reflexión.
Todo está pensado para la empresa y aquellos que le dan vida.
Por eso, el 96 % de nuestros clientes están satisfechos, y nosotros les damos las gracias por su confianza.
La celebración de seminarios y eventos empresariales es el corazón de nuestra profesión; por ello, nuestros equipos se consagran con total profesionalidad al éxito de cada uno de vuestros proyectos. Desde la primerísima toma de contacto hasta la llegada de los participantes y encargados a nuestras casas, lo ponemos todo en marcha para facilitaros la labor de organización.
Con Châteauform’, vuestros eventos de empresa no se llevan a cabo en hoteles ni lugares impersonales en los que se mezclan turistas, bodas y hombres de negocios, sino en lugares mágicos, atípicos o históricos, dedicados en exclusiva a las empresas, donde el trabajo y el descanso se armonizan a la perfección y donde los participantes pueden tomarse su tiempo para reflexionar, conversar y compartir.
Desde hace más de veinte años, nos complace de corazón recibiros y apostamos por dejar atrás las fórmulas de cortesía: preferimos nuestras «fórmulas de amabilidad», un valor genuino totalmente a vuestro servicio. Con Châteauform’, esta «calidez añadida» se suma al «valor añadido» que aportan todas las reuniones de empresa.
La mesa es un momento de comunicación privilegiado cuando se está en un seminario. Para complacer a los participantes y reforzar la socialización, la mesa de Châteauform’ pretende ser generosa y, al mismo tiempo, conservar el gusto por la simplicidad y la autenticidad.
Si Châteauform' est une jolie histoire d'Hommes empreinte de fraternité, d'amitié, de respect et de passions communes ; c'est aussi la rencontre de deux grands experts et visionnaires de la relation clients, Jacques Horovitz & Daniel Abittan.
1996
Nacimiento de Châteauform’ con la inauguración del primer establecimiento en Neuville-Bosc, en Oise. Era la residencia personal de Katy y Jacques Horovitz, que concibieron y transformaron como una casa de amigos para acoger seminarios de empresa. Nace el concepto «como en casa».
"En Châteauform’, las personas son nuestra ética, y los clientes, nuestra religión. Somos una empresa humanista en la que los colaboradores felices hacen felices a los clientes. Esto es lo que llamamos «simetría de intereses». Siempre damos prioridad al cliente y somos generosos desde el principio hasta el final de su experiencia. Siempre le damos la razón porque su percepción es la realidad."